Los que nacimos a principios de los 90, recordamos clásicos de nuestra infancia. ¿Quién no vio Cachureos, o se rió viendo "Salvados por la campana", o la eterna historia del gato y el ratón Tom & Jerry, o se impresionó con goku, el líder de los DragonBall, y disfrutó las aventuras de los traviesos niños de Rugrats? ¿Quién no comió un rico chocolate que se llamaba baton, era un rico tubo de chocolate que costaba $50, o masticó un chicle con forma de fruta dinOvo? Yo anhelaba celebrar mi cumpleaños en Mundo Mágico, o ser una de las Spice Girls.